(sueño del 1 de febrero de 2011)
he soñado con Javier Marías.
estábamos en mi patio, lleno de parras salvajes.
calor.
jugábamos con una manguera y agua.
él era dulce y me quería.
estábamos en mi patio, lleno de parras salvajes.
calor.
jugábamos con una manguera y agua.
él era dulce y me quería.
[inaudito, qué mal estoy, madre...]
Etiquetas: Javier Marías, sueños
Me cuesta visualizar a Javier Marías jugando..., en cambio lo del patio lleno de parras lo veo perfectamente.
No creo que los sueños signifiquen nada. Nunca lo he creído. Al menos no significan nada que podamos deducir con sólo lo que recordamos haber soñado. Sería un intento igual de vano que pretender deducir la forma del fondo del mar observando las olas.
Lo que sucede es que nos sengaña el poso de sentimiento que nos dejan. Le damos crédito y no deberíamos.
Estás fatal, pero los sueños sueños son. Simplemente. Es mucho más claro soñar despierta.
Un abrazo