(y yo sin sombrero)
"Gertrude Stein y su hermana eran todavía unas niñas cuando iban en un tren desde Pensilvania a California y durante el trayecto se asomaron a la ventanilla. En ese momento sucedió un percance y su padre pulsó repetidamente el timbre de la alarma hasta lograr que el convoy se detuviera. Los pasajeros creyeron que había pasado algo muy grave. Todo lo que había sucedido era que a una de sus hijas se le había volado el sombrero. El hombre se apeó y después de caminar media milla lo encontró en un campo de girasoles. La niña recuperó el sombrero, se lo encasquetó en la cabeza y resuelto el problema el tren reemprendió la marcha. Sucesos como éste hicieron que la autoestima de Gertrude Stein tuviera una base muy sólida desde su más tierna niñez."
Manuel Vicent, Gertrude Stein. El deber de parecerse al retrato, El País, Babelia, 31 de enero de 2009
(ahora entiendo muchas cosas sobre Ms Stein.)
Manuel Vicent, Gertrude Stein. El deber de parecerse al retrato, El País, Babelia, 31 de enero de 2009
(ahora entiendo muchas cosas sobre Ms Stein.)
Etiquetas: Gertrude Stein, literatura, Manuel Vicent, padre
De Gertrud Stein recuerdo: el retrato que le hizo Picasso, y el comentario que también Picasso hizo sobre ella: "... no tiene ni p. idea..."
Hombre... entiendo que ayuda provenir de una familia burguesa y acomodada para realizar tal gesto. Y a la autoestima también.
Kisses.
Jj.
pues yo lo que entiendo es muchas cosas sobre mí, mira tú.