Kafka, Esgrima (incluido en Once hijos, 1917)

durante muchos años este dibujo me acompañó a todas partes. era (y es) mi único contacto con el universo de Kafka, sin motivo, sin razón. hoy El País vuelve a recordármelo.

(extraña y entomóloga adolescente.)

Kafka y Camus huracanados

[precioso viento huracanado en Madriz. ¡yupi!]

ayer me preguntaron ¿cómo sigues? me descubrí respondiendo un batiburrillo donde destacaban dos palabras, proceso y náusea. después caí en que ambas son los títulos de dos libros que no he leído (ni pienso leer). cuánta literatura siempre.

últimamente parece que estoy consiguiendo uno de mis deseos atávicos: ver una película cada noche. hoy toca Mataharis bajo la tormenta.