Los países favorecidos en el último de los conflictos con sus vecinos tienen fronteras convexas. Aparecen en los mapas como inflados. Rumanía es uno de ellos. Polonia, también. Los desfavorecidos, en cambio, presentan la triste silueta del corazón de una manaza comida. Tal es el caso de Austria.
Los países favorecidos en el último de los conflictos con sus vecinos tienen fronteras convexas. Aparecen en los mapas como inflados. Rumanía es uno de ellos. Polonia, también. Los desfavorecidos, en cambio, presentan la triste silueta del corazón de una manaza comida. Tal es el caso de Austria.