hago pompones y un bizcocho roto.
quisiera tener la columna vertebral de un cachalote.
intento no ponerme calcetines a pesar de mis pies fríos.
el suelo está tapizado de hojas.
la mesa llena de libros de la biblioteca sin leer.
esos cielos llenos de nubes desafían mis cervicales.
tiempo de asar castañas...
quisiera tener la columna vertebral de un cachalote.
intento no ponerme calcetines a pesar de mis pies fríos.
el suelo está tapizado de hojas.
la mesa llena de libros de la biblioteca sin leer.
esos cielos llenos de nubes desafían mis cervicales.
tiempo de asar castañas...
era arponauta a las 20:04
Yo soy amiga de las Fagáceas.
Que post más bonito has escrito hoy, querida Arponera.
Abrazo otoñal.
Los bizcochos suelen romperse, pero yo los recompongo rápidamente en la tripa. Es por esa habilidad que no me dedico a la repostería.
breve y feliz veo.
excelente amigo
Me gusta tu blog, es cuanto menos, interesante y original.
Si quieres, pásate por nuestro blog.
Un saludo.
http://www.lujuriaydesenfreno.blogspot.com/
te has pasado, arpo!
deberías prodigarte más en textos largos.
que te contaría yo de mi columna vertebral, que siento que no me sostiene...
una palabra mágica para ella, tai-chi, en cuanto salga de ésta, juro que no lo vuelvo a abandonar!
mientras, pienso en la suerte que tienes de pisar hojas secas, saltar incluso sobre ellas...
tomate un ibuprofeno y no lo pienses...y ponte a leer, k.mansfield, k.anne porter...vamos animate...